LAS 3 CLAVES PARA MEJORAR TU JUEGO EN EL TENIS, POR PHILIPPE DEHAES
El tenis es un deporte muy difícil que requiere muchas cualidades: físicas y técnicas, pero también es necesario tener un buen sentido táctico y, por supuesto, grandes cualidades mentales.
A continuación te presentamos una serie de ejercicios que te permitirán trabajar cada aspecto del juego de forma específica.
1./ LA CLAVE TÁCTICA. APRENDE A CONOCERTE A TI MISMO
Para ganar muchos partidos, será importante definir primero el tipo de jugador que quieres ser. Tu perfil de tenista está directamente relacionado con tu carácter. Si eres una persona tranquila, calculadora, reservada, atenta, serás más bien un jugador defensor. Mientras que si te gustan los riesgos, eres creativo, entusiasta, agresivo (en el buen sentido) o instintivo, serás un jugador atacante.
A la hora de analizar tu perfil también hay que tener en cuenta la forma física que tienes en ese momento. Si eres un auténtico defensor y te gusta mucho hacer que el intercambio dure, hacer correr a tu rival y esperar a que cometa errores, puede ser complicado hacerlo si en ese momento tienes un sobrepeso considerable. No olvides que, para ganar un partido, tienes que ganar 2 sets...
Orienta tu juego en función de lo que te gusta hacer y, sobre todo, de lo que haces. No hay nada más importante que destacar tus cualidades intrínsecas. No intentes hacer cosas que no dominas, aunque te parezca que es la táctica adecuada para ganar al adversario que tengas en ese momento. Repite lo más a menudo posible los patrones de juego que te parezcan fáciles y que te hagan confiar en ti mismo.
Pongamos un ejemplo: ¿tu volea es insegura?
Trabaja tus ataques de modo que la volea sea más sencilla de jugar si subes a la red.
A continuación, unos ejercicios para mejorar tu táctica:
Los jugadores juegan un set en el que cambian de lado después de cada juego. Deben aprovechar estos momentos de descanso para visualizar lo que van a intentar hacer en el siguiente juego.
El jugador le dice a su compañero de entrenamiento cuál es el mejor tiro o el patrón de juego más efectivo. Después de cada punto jugado, la puntuación se duplica si ha conseguido utilizar dicho tiro o patrón táctico para ganar. Pongamos un ejemplo: P. ej.: le digo a mi adversario que después de mi primer servicio, le voy a dar un golpe de derecha para que le dé de revés.
Esta serie se juega sin servicio. Divide la pista en dos trazando una línea que vaya desde la mitad de la pista hasta la línea del cuadro de servicio. Los jugadores juegan el punto en cruz, golpe de derecha contra golpe de derecha. Si uno de los jugadores decide cambiar la dirección y jugar a lo largo de la línea, en el revés del adversario, debe hacer obligatoriamente una volea después de este cambio de dirección.
Este ejercicio ofrece varias ventajas:
- Puedo detectar cuál es la mejor bola para atacar (si vengo desde demasiado lejos, me pueden pasar).
- El cambio de ritmo (me veo obligado a golpear más fuerte cuando ataco).
- La paciencia. Aprendo a aceptar los intercambios largos, desde el fondo de la pista (lo que es muy importante en tierra batida).
2/ LA CLAVE TÉCNICA: SIMPLIFÍCALA Y TOMA CONCIENCIA DE TU CUERPO
Necesitaría mucho espacio para explicar de forma detallada las particularidades de cada golpe. Por lo que voy a proponer un enfoque distinto para que trabajes tu técnica en el entrenamiento.
Tener el cuerpo relajado es un factor esencial para encontrar el ritmo adecuado. Vas a trabajar tu postura corporal e intentar encontrar la posición más natural posible entre cada golpe. Mantener esta actitud de atención te permite reaccionar rápidamente, analizar la situación durante el intercambio de pelotas y recuperarte entre cada golpe.
La cara: ¿soy capaz de jugar sin tensar la cara cuando golpeo la pelota? Mantén los músculos de la cara relajados cuando golpees la pelota.
Los hombros: empieza cada preparación orientando los hombros (y no estirando el brazo hacia atrás).
Los brazos: ¿están relajados o tensos? La cabeza de la raqueta debe a la altura de la mano y los codos ligeramente doblados delante de ti. Estoy tranquilo, observo y estoy preparado para reaccionar.
Las manos: en el caso de los diestros, la mano derecha no debe agarrar el mango con crispación. Es la mano izquierda la que sostiene casi por completo la raqueta entre cada golpe.
El juego de piernas: golpea la pelota de forma que te obligues a no "moverte detrás" de la pelota. Siente el equilibrio. Un buen juego de piernas permite jugar cada pelota en las mejores condiciones posibles. Busca una posición estable detrás de la pelota.
La respiración: es la clave... ¡es tan importante que podríamos dedicarle un capítulo entero! Y es que es la solución milagrosa para gestionar mi relajación y manejar mis emociones. Golpea exhalando en el momento en el que la pelota impacta con la raqueta.
3/ LA CLAVE MENTAL: CONFIAR EN SÍ MISMO... ¡SIEMPRE!
Cuando hablamos del aspecto mental, el objetivo es no ceder, rechazar la derrota cueste lo que cueste, no dejar escapar ningún punto, no desanimarse nunca, no rendirse jamás. Pero también hay otros elementos que entran en juego para definir una buen estado mental:
-La gestión del momento (una final interclubes, el torneo del club más importante del año, juegas contra un jugador al que nunca has ganado o contra un jugador contra el que no puedes perder)
-La gestión de las emociones durante el partido (¿Estoy tranquilo y sereno? Cómo reaccionar si empiezas mal el partido, qué debo hacer en los momentos importantes, etc.)
Ejercicios para mejorar tu «juego mental»:
Juega un partido al mejor de cinco sets con tu contrincante y, en cada set, uno de los dos empieza con una ventaja de 4-1 (Para aprender a jugar bajo presión)
Juega un set en el que cada jugador puede tener un total de cuatro puntos gratis y usarlos en los momentos en los que considere oportuno (Para dominar las emociones)
Empezad cada set 4-4 para aprender a resolver bien el final de los sets (Para jugar bien en los momentos importantes)
Para mejorar tu juego es esencial que, durante los entrenamientos, te concentres en los aspectos específicos que quieres mejorar. Por ejemplo, si te dedicas a trabajar tu técnica en el calentamiento, no te enfades si pierdes pelotas. Si quieres trabajar los planes tácticos jugando puntos, no te obsesiones con tu técnica. Confía en ti mismo y atrévete a intentar cosas.
Por cada sesión de una hora de tenis, te sugiero que dividas tu entrenamiento en tres partes.
Dedica los primeros veinte minutos al calentamiento y a la parte técnica.
La segunda parte: haz ejercicios tácticos con o sin saque en forma de puntos.
Y, por último, termina con algunos juegos libres para definir tu juego.